¡Menudo lío! los duendes se han puesto a jugar en la estantería de los ingredientes mágicos y ahora no hay manera de encontrar lo que se necesita para hacer las pócimas. Convertíos en brujas y brujos, moved a los duendes adecuados y conseguid completar vuestras pociones antes que el resto. ¡Ah! y no olvidéis mover al gato, que siempre se sienta justo encima del ingrediente que más necesita.